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La adquisición de naves industriales para su posterior arrendamiento se ha convertido en una opción cada vez más atractiva para aquellos inversores que buscan obtener una buena rentabilidad.
El auge del comercio electrónico ha causado que haya una mayor demanda de espacios de distribución y almacenaje, pues las empresas que pertenecen a ese sector necesitan una fuerte red de logística. Si estás pensando en apostar por un proyecto de bienes raíces que no sea la vivienda, en este artículo te contamos cuáles son los beneficios de invertir en naves industriales.
- Estabilidad financiera: en este momento, adquirir una nave industrial brinda estabilidad financiera porque están al alza en un mercado que está también en crecimiento, razón por la que existe demanda por estos espacios.
- Zona Industrial: muchas de las naves industriales en España se encuentran dentro de parques industriales, lo que contribuye a que las empresas tengan una localización estratégica que les permita reconfigurar su cadena de suministro.
Claves a tener en cuenta para invertir
- Que esté en una ubicación estratégica: como con cualquier inmueble, vale la pena investigar y revisar que el lugar en el que se ubicará la nave industrial es el adecuado. Lo ideal es que esté en una zona ya consolidada, ya que están cerca de núcleos urbanos y tienen buenas comunicaciones y caminos.
- Funcionalidad: es recomendable revisar el estado del inmueble y cerciorarnos de que cumpla con las funciones para las que se requiere. De no ser así, se puede optar por una nave industrial, que se adapte a cada negocio por su tipo de estructura. Se deben revisar también los suministros básicos que posee, y el tipo y la calidad de los materiales con los que está hecha.
- Costo Beneficios: antes de pagar por el inmueble hay que analizar diferentes factores, como el estado de la nave industrial, las características de la misma, el tiempo de entrega y los servicios que ofrece.
- Rentabilidades atractivas: las naves industriales tienen una rentabilidad superior a otros inmuebles y a otros productos financieros.
- Inversión en rentabilidad. Invertir en una nave industrial proporciona un beneficio mensual en rentas de alquiler que permite amortizar la inversión desde el inicio.
- Activos reales: un bien inmueble es un activo bien diferente a los financieros, cuyo comportamiento es más volátil, sobre todo para los inversores no profesionales. Para el pequeño inversor, el hecho de que se traten de bienes tangibles supone una garantía que permite minimizar el riesgo. Para otros inversores especializados, puede servir para reducir el riesgo global de la cartera de inversiones.
- Alquileres más largos y flexibles: las naves suelen generar rentas de alquiler protegidas con contratos de larga duración, que nos permiten predecir cuáles son las rentas que se van a generar.
Conclusión
No hay naves industriales suficientes para satisfacer toda la demanda. Este es un mercado con mucho potencial y con una alta rentabilidad. Esto es un indicio de que invertir en naves industriales es un buen negocio. El futuro de este sector va a seguir creciendo, sin duda, en los próximos años.
