Tiempo de lectura: 2 minutos
La inversión en inmuebles comerciales está dentro de las 3 categorías más populares de inversión inmobiliaria junto a la inversión en inmuebles residenciales e industriales. Se conoce como inmueble comercial porque el inquilino es una empresa o negocio. Mientras que algunos negocios prefieren comprar los inmuebles que ocupan, la mayoría de compañías optan por alquilar. Esto hace que el propietario o inversor de un inmueble comercial perciba rentas periódicas del inquilino.
La rentabilidad de este tipo de inmuebles viene por dos fuentes: alquiler o venta. En el artículo de hoy nos centramos en la rentabilidad del alquiler y sus motivos principales.
Rentabilidades atractivas
Una de las razones por las que los inversores profesionales e institucionales desembarcan en este tipo de inversión es, como te hemos comentado, por sus atractivas rentabilidades. Los locales comerciales generalmente tienen una rentabilidad superior al de las viviendas y otro tipo de activos.
Los locales son el producto que mayor rentabilidad tiene en casi todas las capitales. El mayor retorno se obtiene en Ávila (11,4%), Murcia y Lugo (10,6% en ambos casos). Le siguen las rentabilidades de Lleida y Zaragoza (10,5% en las dos ciudades), Bilbao (10,1%) y Huelva (10%). En Barcelona y Madrid, la tasa se sitúa en el 8,5% y 8,1% respectivamente, según datos de Idealista.
Flujos de caja continuos
La principal característica de las inversiones en locales comerciales es que distribuyen beneficios periódicos. Estos beneficios provienen de las rentas de alquiler del inmueble. La renta de alquiler es comparable al cupón de un bono y consigue ir obteniendo ingresos y rentabilidades periódicas que van amortizando la inversión inicial y una vez que se ha amortiza, supondrá un ingreso extra mensual.
Un local comercial es un activo real
Un local comercial es un activo tangible, lo podemos tocar, ver y sentir, algo que no pasa con los activos financieros. Este tipo de inmuebles tienen una mejor rentabilidad que cualquier producto financiero. Además, pese a que se requiera contar con liquidez para comenzar, la inversión en este tipo de producto suele ser más estable y creciente en el tiempo.
Se revaloriza con el tiempo
Dependiendo de la ubicación y de su tránsito peatonal, se pueden encontrar locales comerciales muy atractivos, que a la larga siempre tendrán demanda. Si se aplican mejoras estructurales para hacerla más funcional, se podría incrementar el valor del inmueble, ya que este tipo de mejoras normalmente son muy valoradas y las posibilidades de conseguir inquilinos comerciales interesados en el local aumentan significativamente.
Se valoran mucho las vidrieras y amplios frentes, la cantidad de baños (si apunta a un local gastronómico), la ventilación y el sistema de aire acondicionado y calefacción del local. Por otro lado, es un plus tener instalaciones eléctricas nuevas y tener un buen sistema de iluminación, así como suelos de buena calidad. Estos factores contribuyen a defender mejor el precio a la hora de vender/alquilar la propiedad.
Definitivamente, los locales comerciales a largo plazo son una inversión estable y atractiva. La clave: la ubicación y su tránsito peatonal. Eso abre puertas a un presente y futuro con alta demanda para este tipo de activos. La ubicación sobre avenidas y arterias comerciales, suelen ser un punto de mayor exposición y un foco comercial atractivo para considerar una inversión en esta tipología de propiedades.